¿Estudios graduados?
La opción que ofrece ventajas competitivas
Dr. Hernán A. Vera Rodríguez, catedrático y decano
Colegio de Estudios Graduados en Ciencias de la Conducta y Asuntos de la Comunidad, Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico
Las pasadas semanas miles de estudiantes se graduaron de las diversas universidades del país. La mayor parte de ellos logró sus títulos de bachillerato. Ahora se preguntan, ¿Debo buscar un trabajo? ¿Me quedo en la Isla, o me lanzo al mundo laboral fuera de Puerto Rico? ¿Será mi oportunidad perfecta para continuar estudios graduados? Estas líneas decisivas son fundamentales para potenciar su futuro profesional. Más allá de ser parte de la fuerza laboral, continuar estudios de maestría o doctorado es la mejor opción. Esto es aún más importante teniendo en cuenta que provee mayores alternativas competitivas, óptimas destrezas laborales y una mejor calidad de vida.
El Negociado de Estadísticas Laborales de los Estados Unidos (BLS) en un informe de 2017 presenta evidencia de que, a medida que aumenta la preparación académica de un individuo, asimismo aumentan los salarios y disminuyen sus posibilidades de desempleo (BLS, 2017). Así pues, de ese informe se infiere que los salarios medianos mensuales de los graduados de maestría eran $912 dólares más altos que los graduados de bachillerato. A su vez, el salario mediano de un graduado de doctorado era $1,368 dólares mensuales por encima de los de un graduado de maestría. De forma similar, la tasa de desempleo de los graduados de doctorado en los Estados Unidos era solo de 1.5%, mientras que las de los de maestría era de 2.2% y las de los graduados de bachillerato de un 2.5%. Así que son evidentes las ventajas en salarios y empleabilidad.
Asimismo, el completar un grado de maestría o de doctorado ofrece ventajas competitivas en el mercado laboral. Existe una relación piramidal con respecto de las personas que completan sus bachilleratos, maestrías y doctorados. Es decir, que muchas más personas terminan sus bachilleratos, pero entre los que completan maestría o doctorado los números son menores. Así pues, a medida que ascendemos en esta pirámide de grados académicos, ganamos ventajas competitivas para la obtención de un empleo.
Esta opción, igualmente, brinda destrezas laborales prácticas. Por lo regular, los programas graduados en general y los de Ciencias de la Conducta en particular, exigen unas experiencias de práctica e internado que les garantizan a los futuros patronos que la persona que contratarán tiene experiencias reales en el campo laboral al cual aspira a ingresar. Esto hace también que los graduados de estas disciplinas tengan mucha seguridad en sus capacidades al entrar al mundo laboral. Solo como ejemplo, un candidato a doctor en Psicología completa 2,000 horas de internado, mientras, en la Maestría en Consejería en Rehabilitación completan 100 horas de práctica y 600 horas de internado. Un candidato a Maestría en Trabajo Social Clínico realiza 900 horas de práctica. Estas experiencias son muy valoradas por los patronos potenciales a la hora de seleccionar candidatos a empleo.
Es simple, las personas que completan estudios posteriores al bachillerato tienen, por lo general, ventajas competitivas en el mercado laboral. Asimismo, dichos estudios parecen ser para una mejor calidad de vida. Indudablemente, los estudios graduados son una buena inversión para el futuro.