Revelan resultados del primer estudio de campo sobre el Sistema de Salud de Puerto Rico
Estudio mide sentir en torno de la calidad y la satisfacción con los servicios médico hospitalarios.
La Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico (PUCPR) presentó los hallazgos de su más reciente estudio “La percepción de la calidad y la satisfacción con los servicios médico hospitalarios en Puerto Rico”. Esta es la primera investigación de campo de la Institución sobre la salud en la Isla. El amplio estudio, que incluye una muestra de 600 pacientes en 65 municipios, mide lo que piensan los pacientes en torno de la calidad y la satisfacción con los servicios médico hospitalarios. Presenta, además, los principales retos que enfrenta la salud en Puerto Rico en momentos de crisis económica.
Entre los hallazgos está que la obtención de servicios médicos en Puerto Rico es una tarea complicada y tediosa. La mayoría de los pacientes entiende que, aunque la medicina es asequible, también es sumamente costosa. Los encuestados perciben diferencias en la sensibilidad en el trato al paciente, de acuerdo con el servicio médico que posean. Además, reflejó que los elevados deducibles afectan los servicios, aunque destaca que existe una alta confianza en los médicos y laboratorios.
Según el Dr. Hernán Vera, decano del Colegio de Estudios Graduados en Ciencias de la Conducta y Asuntos de la Comunidad de la PUCPR, quien lideró la investigación realizada durante los pasados meses, “Este es uno de los estudios más completos que se ha realizado para medir la percepción que tiene la ciudadanía sobre la calidad de los servicios de salud que recibe. Es parte del compromiso que tenemos en La Católica con realizar investigaciones pertinentes que sirvan de instrumento para establecer política pública y enfocar las prioridades del país”.
Por otra parte, el presidente de la PUCPR, Dr. Jorge Iván Vélez Arocho, expresó que esta investigación da seguimiento a tres estudios anteriores (Las causas de ansiedad de los retirados; La pobreza en Puerto Rico y La situación de los adultos mayores en la Isla). Explicó que “El tema de la salud se presenta como una preocupación recurrente, y esta fue la semilla que germinó en la presente investigación. Agregó que esta investigación nace de la filosofía de la Iglesia Católica que considera la salud como un derecho humano fundamental.
El estudio fue realizado por el decano del Colegio de Estudios Graduados en Ciencias de la Conducta y Asuntos de la Comunidad Dr. Hernán Vera Rodríguez junto a la Dra. Ilia Rosario Nieves, la profesora Elsie Ruiz Santana y la estudiante graduada Jeanette Tosas Alicea.
Los hallazgos del estudio
En términos generales, el estudio plantea que el 67.20% de los participantes tiene una percepción promedio o moderada sobre la calidad del sistema de salud de Puerto Rico, lo que significa que la percepción no es totalmente negativa. Sin embargo, un dato relevante es que no importa el plan médico que tuvieran los pacientes encuestados, todos percibieron que la obtención de servicios médicos en Puerto Rico es costosa, complicada y tediosa. Uno de los puntos que enfatiza es lo oneroso de las largas horas de espera; la dificultad para conseguir citas con especialistas y los altos deducibles de los planes médicos a la hora de cubrir procedimientos especializados.
Asimismo, la mayoría de los encuestados (88.4%), le reconoce poca efectividad al Gobierno para solucionar la crisis de salud. En el renglón de preguntas abiertas hechas como parte del estudio, el Dr. Vera señaló algunas de las citas más recurrentes en torno de la poca efectividad gubernamental. Entre ellas: “El problema es el desangre que crea la Reforma de Salud en Puerto Rico”; “La burocracia es extremadamente lenta con las personas de menos ingresos”; “El sistema de salud en Puerto Rico es muy costoso, dirigido a la medicalización y no a la prevención”; “La salud en la Isla es un negocio”; “Debería desligarse la política del sistema de salud para evitar la corrupción”. Por otro lado, para la Dra. Ilia Rosario, directora de la Escuela Graduada de Psicología de la PUCPR y co investigadora del estudio, la investigación permitió conocer la opinión de los participantes en cuatro áreas importantes. A saber, problemas y retos; ventajas y virtudes del sistema de salud; áreas a mejorar y la experiencia en la denegación de servicios. “Más allá de los números y porcientos, las narrativas de los participantes y sus vivencias demuestran los grandes retos que enfrenta el sistema de salud de Puerto Rico” indicó la investigadora.
Igualmente, el estudio valida que se percibe la existencia de desigualdades entre los seguros médicos públicos vis a vis los privados. La asequibilidad por razones de costos reflejó (62.65% planes privados vs. 74.44% Mi Salud); la confiabilidad (Los asegurados de planes privados mostraron más confianza en las instituciones médicas – 74.80% frente 71.90% de Mi Salud) y el trato recibido en distintos puntos del sistema de salud (75.69% planes privados vs. 72.85% Mi Salud). A pesar de la aparente pequeña diferencia porcentual, los investigadores hallaron diferencias estadísticamente significativas en las puntuaciones de los participantes en los renglones antes mencionados.
Todos los participantes del estudio, percibieron los costos más altos en los renglones de: la atención por médicos especialistas (54.50%), el costo de los hospitales (56.50%) y los deducibles de las medicinas (58.00%).
Otro punto relevante del estudio es que los participantes manifestaron mayor confianza en los laboratorios clínicos, los médicos especialistas y el personal de enfermería. En contraste, la puntuaciones más bajas en el renglón de confianza fueron para los hospitales (39.20%) y el servicio en las salas de emergencia (46.70%).
Entre las recomendaciones hechas por los entrevistados, la mayoría propone que debe haber una reducción en costos de los servicios médico hospitalarios para mejorar el sistema de salud. Recomiendan, además, que deben reducirse los deducibles de las medicinas y los exámenes médicos, y expresan la necesidad de que los seguros médicos aumenten sus cubiertas en beneficio de los pacientes.
Los participantes indicaron que, en ocasiones, los seguros médicos les habían rechazado medicamentos en las farmacias, principalmente por razones de su costo o por haber excedido el tope establecido por el plan. “Los altos deducibles en medicamentos y pruebas especializadas son una limitación para un cuidado médico adecuado en un amplio sector de la población”, sostiene el estudio.
Recomendaciones
Entre las recomendaciones más relevantes hechas por los investigadores se propone que las Comisiones de Salud de la Cámara de Representantes y el Senado de Puerto Rico, así como la Oficina del Comisionado de Seguros, indaguen sobre la situación de los altos deducibles que los planes médicos les imponen a sus asegurados en aspectos tales como las medicinas y las pruebas médicas especializadas.
También, deben estudiarse las aparentes disparidades existentes en la provisión de servicios médico hospitalarios entre los participantes del plan de salud del Gobierno de Puerto Rico, conocido como Mi Salud, y las cubiertas privadas. Deben ampliarse las cubiertas de los seguros médicos y reducir el costo de los servicios médico hospitalarios para los pacientes, a la vez que organizaciones gubernamentales como ASES, el Departamento de Salud, y el U.S. Office of Minority Health, están llamadas a llevar a cabo estudios de seguimiento más profundos y abarcadores sobre este tema.
Las oficinas médicas y las salas de emergencia de los hospitales deben establecer esquemas organizacionales de atención al paciente que reduzcan sustancialmente el tiempo de espera. Profesionales expertos en Ingeniería Industrial, Administración de Empresas, Administración Pública y gestión de la calidad, pudieran hacer grandes aportaciones sobre este particular.
Existe la necesidad de hacer de la prevención uno de los pilares del modelo salubrista del país. Cambios tales como mejorar la disponibilidad de vacunas, facilitar la autorización de pruebas de laboratorio rutinarias, y enfatizar la educación en nutrición, pudieran ayudar a mejorar la salud de la población. Esto, además, pudiera redundar en la reducción de costos de operación de los seguros médicos.