Facultad y empleados de La Católica reciben la vacuna de refuerzo
La iniciativa, además, incluyó la administración de pruebas para detectar la COVID-19
Como una medida preventiva para minimizar los riesgos de contagio con COVID-19 y para cumplir con las exigencias de la Orden Ejecutiva, la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico organizó una clínica de vacunación para que la facultad y los empleados recibieran la tercera dosis de la vacuna. De igual forma, se les administró a los empleados la prueba para detectar el virus previo a presentarse a sus áreas de trabajo.
“Es una gran satisfacción proveer a nuestra comunidad universitaria la oportunidad de acceder a las pruebas y a las vacunas, como parte de las políticas institucionales de bienestar y salud de la PUCPR. Seguimos comprometidos con el bienestar de nuestra comunidad universitaria y preparando el mejor escenario para el regreso a la presencialidad que todos esperamos” sostuvo René Marrero, ayudante del presidente de la PUCPR.
Del 10 al 13 de enero se administraron 577 pruebas y 328 vacunas en el recinto de Ponce. Mientras en el recinto de Mayagüez se administraron 96 pruebas y 16 vacunas y en Arecibo 66 pruebas y 55 vacunas.
El Dr. Jorge Iván Vélez Arocho, presidente de la PUCPR, aclaró que el personal docente y no docente deberá estar vacunado con la tercera dosis y además presentar prueba negativa de COVID de no menos de 48 horas para regresar a sus labores. Los estudiantes que asistan a laboratorios deberán presentar evidencia de vacunación completa, incluido el refuerzo, o prueba negativa de COVID de no menos de 48 horas antes de cada semana. Cuando finalmente retornen las clases en la modalidad totalmente presencial, los estudiantes deberán presentar evidencia de su refuerzo. Indicó que, como parte de las medidas implantadas en los recintos de Ponce, Arecibo y Mayagüez se instaló un amplio sistema de control de calidad de aire en todos los salones, oficinas, salas de conferencias y espacios de encuentros.