CAM6: Un nuevo impulso misionero para América desde Puerto Rico

Líderes misioneros se comprometen a llevar el Evangelio a los rincones más remotos del continente

“Con un nuevo ardor misionero y con todas las fuerzas del Espíritu Santo para continuar la misión de la Iglesia”.  Así coincidieron misioneros de diversos países de América sobre los resultados del Sexto Congreso Americano Misionero (CAM6) Puerto Rico.  El histórico encuentro eclesial reunió a sobre 1,200 líderes misioneros de todo el continente americano en la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico.

Para Myriam Guadalupe Villegas Urbina, de nacionalidad mexicana, esta fue su primera vez en un CAM. “Hay mucho trabajo que hacer y sobre todo tomar conciencia que, desde nuestro bautismo, ya somos misioneros. Y que no importa en el lugar donde estemos tenemos que ser misioneros desde nuestra trinchera. Tenemos mucho trabajo como Iglesia. Yo no soy misionera, pero me llevo el trabajo de animar a toda mi comunidad y a mi diócesis de que tenemos que apoyar a las misiones porque hay mucha necesidad.  Fue  una experiencia maravillosa vivir este encuentro porque nos anima y nos motiva a seguir trabajando para el Reino de Dios” sostuvo.

Del 19 al 24 de noviembre se generaron espacios de reflexión misionológica y experiencias de fe para discernir y presentar propuestas a los desafíos que enfrenta la Iglesia en la actualidad.

Por su parte, Mons. Eusebio Ramos Morales, obispo de la diócesis de Caguas  expresó “Esta fiesta del Espíritu Santo realmente se ha convertido en una experiencia viva de entusiasmo, de alegría de refortalecernos y reafirmarnos en nuestra misión como bautizados. Yo creo que realmente la experiencia nos lanza a todos ante un mundo herido, ante un mundo tan diverso hoy y con tantos retos a nivel de la vida humana y a nivel social. Este acontecimiento manda un montón de cristianos a nuestros países para ser signo de luz y de paz en medio de todas esas luchas”.

Sobre las propuestas concretas sostenidas a través del Congreso el obispo sostuvo  “Tiene que ser un abrazo de comunión, de solidaridad misionera porque, si es cada cual en lo suyo, no funcionamos. La Iglesia es el cuerpo de Cristo que nos invita a esa comunión, a una comunidad de bien. Concretamente la comunión eclesial que se tiene que hacer sentir hoy en tantos niños que tienen un futuro incierto”.

América estuvo representada por obispos, sacerdotes, religiosos, laicos de movimientos eclesiales y líderes de comunidades. Delegados de 40 países como Canadá, Estados Unidos, México, Guatemala, Honduras, El Salvador, Costa Rica, República Dominicana, Puerto Rico, Venezuela, Colombia, Ecuador, Bolivia, Chile, Brasil, Paraguay, Uruguay, entre otros, formarán parte de estos encuentros.

Ya al finalizar el CAM6, el cardenal Baltazar Porras Cardozo, arzobispo emérito de la arquidiócesis de Caracas, Venezuela y legado pontificio del papa Francisco para el CAM6, se mostró entusiasmado por los resultados del Congreso.

“Es una gracia muy grande para mí que el papa me haya nombrado delegado para representarlo en este CAM. Ver el entusiasmo, ver el sentido realmente misionero, ver el ejemplo que desde nuestras iglesias pequeñas uno se podría preguntar, ¿De Puerto Rico puede ser algo bueno siendo un país tan chiquito?, pues estamos viendo aquí de verdad lo que es ese espíritu misionero que se abre y que es continuidad de lo que Puerto Rico ha sido desde el inicio. Fue desde la Española y San Juan de Puerto Rico de donde salieron las primeras oleadas de misioneros hacia tierra firme que fueron los que nos transmitieron la fe. Y ese espíritu sigue vivo y con este CAM pues toma un impulso mayor de ejemplo para las otras Iglesias de América Latina con todo lo que esto significa y dejará como fruto. Este CAM no es un evento más que pasa, sino que es un oasis. Es un momento de tomar fuerza para seguir adelante en una empresa tan bella como es la de ser misionero y portar el cariño y el amor que nos nace del Evangelio que queremos transmitirlo a los demás” explicó el cardenal Porras Cardozo.

Ya al culminar este acontecimiento de la Iglesia, se anunció la nueva sede del CAM7.  Brasil será el país que acogerá a la delegación misionera continental.

La finalidad de las Obras Misionales Pontificias es fomentar la cooperación misionera universal, promover el espíritu misionero, informar sobre la vida, así como de las necesidades de la misión universal y contribuir a que las iglesias locales oren las unas por las otras para de esa manera ayudarse mutuamente con el envío de misioneros y de medios materiales.