A un 100% la calidad de aire en los salones de clases
La Católica diseña un riguroso sistema para garantizar la salud de los Pioneros.
Como una movida innovadora para velar por la salud y la seguridad de los estudiantes y la comunidad universitaria, la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico ya instaló un amplio sistema de control de calidad de aire en todos los salones, oficinas, salas de conferencias y espacios de encuentros en sus tres recintos. Así lo informó el director del Departamento de Infraestructura y Conservación de la PUCPR, Ing. Armando Rodríguez Torres.
“Utilizando varias tecnologías, hemos establecido un sistema de control de calidad de aire que destruye microorganismos, como virus y bacterias, que se encuentren en el aire. Igualmente, reduce el particulado de materia microscópica, detecta la humedad relativa, la temperatura y los olores fuertes y, finalmente, nos permite monitorear y comunicar la condición del aire en cada lugar en todo momento”.
Según explicó, “Se trata de un sistema compuesto que combina muchas tecnologías distintas incluyendo, principalmente, la ionización biopolar. El equipo se instala en los acondicionadores de aire y lanza iones bipolares de oxígeno al ambiente de manera que todo el aire en un espacio cerrado se nutra de iones. Esos iones bipolares se adhieren a los virus y bacterias y los matan. De la mima forma, los iones bipolares se adhieren a las partículas de materia microscópica que se encuentran en el aire haciéndolas más grandes y provocando que caigan al suelo o queden atrapadas en los filtros de aire. Se trata de un proceso activo y efectivo que está constantemente inyectando iones y eliminando virus y bacterias”.
El sistema incluye también, como estrategia de apoyo, equipos instalados en lugares específicos de encuentro que también tienen tecnología de ionización, luz ultravioleta, filtros de carbón, filtros HEPA y ozono. Estos equipos están hechos en “stainless steel” y son para atención adicional en caso de ser necesario.
Otra parte muy importante del sistema son los sensores para monitorear la calidad del aire. Estos permiten estar seguros de que los equipos estén funcionado bien, haciendo el trabajo que se supone que deban hacer.
Finalmente, todos los equipos de control de calidad y sensores van de la mano de monitores instalados alrededor de cada recinto que dan a conocer a la comunidad universitaria la calidad del aire en los salones de clases y oficinas las 24 horas del día, los 7 días de la semana. “Estos esfuerzos garantizan un ambiente seguro y salubre para los estudiantes de los tres recintos. Vendrán a un lugar en donde el aire que respirarán será de gran calidad y podrán sentirse confiados, porque podrán comprobar por sí mismos la información sobre la calidad de ese aire”, expuso Rodríguez.