Un paso adelante en la inclusión
PUCPR se destaca en evento de la FIUC
Por: Celimer M. Torres
Para cualquier persona sin discapacidad montarse en su vehículo, llegar a la Universidad, ir a su salón y tomar su clase es relativamente sencillo y sin mayores complicaciones. Pero no necesariamente es esa la situación para un grupo de la población estudiantil en todas las Universidades. Para establecer un plan de inclusión en el que se les provean los servicios y asistencias necesarias a los estudiantes con discapacidad en las universidades católicas, la Federación Internacional de Universidades Católicas(FIUC) celebró una reunión recientemente en República Dominicana.
A esta reunión asistieron las delegaciones de la Universidad Rafael Landívar de Guatemala, Universidad Católica Nuestra Señora Reina de la Paz en Honduras, Pontificia Universidad Madre y Maestra de República Dominicana y la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. Luego de la presentación del Plan resultó que la PUCPR está un paso adelante en el tema de la inclusión de los estudiantes con discapacidades. Al contar con la Oficina de Servicios a Personas con Impedimentos (OSPI), la PUCPR cayó dentro del plan en el proceso de reevaluación de los servicios. Las otras universidades deben comenzar con el establecimiento de una oficina que provea estos servicios.
“Ante este resultado tan positivo, entraremos en una reevaluación de las políticas, planes estratégicos, investigación y avalúo para poner en proceso las estrategias que aporten a los servicios de los estudiantes con discapacidad que estén en la Universidad y los que próximamente formarán parte de esta, para poner en valor la inclusión. Próximamente recibiremos una visita de la Universidad de Valencia quien está a cargo del proyecto a través de la FIUC para conocer la Universidad y presentarle el trabajo que estamos haciendo con el propósito de que las universidades católicas se unan en este proyecto y finalmente seamos parte de una cultura inclusiva” explicó la Profa. Wanda Soto, directora de OSPI.
Alrededor de 660 estudiantes del recinto de Ponce requieren del apoyo de OSPI. Uno de los aspectos más importantes que resalta en la Universidad es la inclusión de los estudiantes con discapacidades en todas las experiencias y oportunidades que tengan los estudiantes regulares y que la facultad les provea la asistencia necesaria para que este proceso se cumpla.
No hay mejor testigo de la inclusión que la experiencia de los estudiantes que la viven. Ese es el caso de Aileen Alicea Rivera, estudiante de cuarto año de Ciencias Generales y quien padece de miopía progresiva, así como el de Dereck Hernández Gómez, estudiante de tercer año de Psicología, quien es ciego.
Para Dereck los servicios de OSPI han sido muy efectivos. “Me ha beneficiado enormemente porque, al ser ciego, necesito servicios como asistencia tecnológica que son excelentes en la Universidad y también acomodo razonable. El contar con una asistente que me acompañe a las clases y me guíe ha sido fundamental para lograr mis metas académicas” expresó el joven. El futuro psicólogo añadió que al momento de escoger una universidad evaluó varias alternativas. “Fui a varias universidades pero ninguna contaba con lo que yo necesito para alcanzar mis sueños. Los profesores colaboran mucho con este proceso de la inclusión y de verdad nunca me he sentido diferente ni rechazado por los demás” indicó Dereck.
Para Aileen, el ingreso a la Universidad fue un alivio. “Cuando estaba en la escuela se me hacía difícil obtener buenas notas, pero en la Universidad es muy diferente. Los profesores colaboran conmigo poniendo en letras grandes lo que escriben en las pizarras y en los exámenes. La asistencia y el acomodo razonable que recibo me han ayudado a mejorar mucho académicamente” sostuvo Aileen. Ambos jóvenes coinciden en que siempre hay áreas que se pueden mejorar, pero están satisfechos y seguros con el apoyo que reciben de la PUCPR.
“En este momento de reflexión la Universidad debe mirar la inclusión como una acción de caridad cristiana y no permitir la marginación del ser humano, por tanto hay que despertar nuestro compromiso de fe y elevar la mirada hacia esa universidad inclusiva” finalizó Soto.