MENSAJE CLARO CONTRA LA VIOLENCIA.

Un pueblo unido, pidiendo un alto a la violencia.

Por Carmelo Cedeño de la Rosa.
Jóvenes, adultos y niños se unieron al llamado del movimiento “Forjando un Nuevo Comienzo” para decir “Pero, hoy NO es el día”. Un nutrido grupo de cuidadanos partieron desde la Plaza Las Delicias de Ponce, frente al Municipio  de Ponce, para apoderarse de las calles de la ciudad y pedir un alto a la violencia que arropa al país.

La marcha finalizó en el Arco del Cincuentenario de la Pontificia Universidad Católica de Puerto Rico. Todos los participantes  se unieron en una sola voz para pedir un alto al crimen, a las drogas, al maltrato, al “Bullying” y a todos los males que afectan a Puerto Rico.

“Aún hay gente que ignora que Dios los ama y que hay solución a sus problemas.  No deben pensar que todo está perdido”, expresó la pastora y cantante, Claudina Brinn.  “Hoy Dios tocó el corazón de mucha gente porque, como dice la campaña, Hoy no es el Día.  Muchas personas se unieron para dar a conocer el amor de Dios y así, comenzar a llevar el mensaje de salvación. Que existe un Dios y que hay esperanza para que nuestra isla sea una mejor”, afirmó la Pastora Brinn.
En un aparte para los medios de comunicación, la primera mandataria de la Ciudad Señorial, María “Mayita” Meléndez, expresó: “Me siento agradecida y muy contenta porque la juventud dijo presente y sobre todo, estos jóvenes son los forjadores de un mejor Puerto Rico.  La joven Nicole Marie Ruiz López, alumna del Liceo Ponceño, expresó  “Me siento muy orgullosa porque esto es algo que significa mucho para nuestra ciudad. Está en nuestras manos, como jóvenes, fomentar un futuro positivo y nosotros debemos de hacer la diferencia.  Podemos lograrlo celebrando este tipo de actividades en las cuales se rompen todas las barreras”.

La gran familia de la Pontificia Universidad de Puerto Rico se unió a este movimiento.  La coordinadora de Exalumnos de la PUCPR apoyó en la logística del evento.   “Me siento orgullosa y emocionada de ver tantas personas aquí, pero, en especial, a tantos jóvenes. Yo tengo la esperanza de que los jóvenes harán la diferencia en este país, porque los males sociales que nos aquejan no son un problema político, si no de valores”, expresó Mascaró Giusti.

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